Viernes 25 de marzo.

Buenos días:

 

En la liturgia de la Iglesia Católica también hoy se hace un parentésis con respecto al tiempo de cuaresma, celebrando la solemnidad de la ANUNCIACION DEL SEÑOR.

 

Lecturas:

 

1. Isaías 7:1014;8-10

2. Salmo 39:7-11

3. Hebreos 10:4-10

4. Lucas 1: 26-38

 

Hoy encomendamos especialmente a:

 

- Sr. George Sears (NY,USA), ofrecido por su hijo, el Padre George Felipe Andrés Sears, sacerdote de la arquidiócesis de Nueva York.

- Sras. Martha (Medellín) y Mariela (Manizales), Merino Botero, hermanas de Mons. Bernardo Merino Botero, obispo emérito de la diócesis colombiana de la comunión episcopal - anglicana.

-  Sra. Pepita de Merino , esposa del Sr. Obispo Merino.

 

Con gusto presentamos al Señor a estos hermanos que tienen problemas con su salud, y nos unimos con afecto a sus familiares.

 

La solemnidad de hoy conmemora la encarnación del Hijo de Dios en el seno de María. Es muy antigua en nuestra liturgia.

 

El relato de Lucas 1: 26-38 nos narra brevemente este acontecimiento, y nos invita a orar con varios elementos. Uno esencial es que Dios escoge a María para ser el instrumento humano que hace posible la encarnación, a través de María Dios se implica en el ser humano, se hace humano, se compromete plenamente con la humanidad, y ella, disponible, incondicional, sin límites, acepta gozosamente esta elección. Ella porta en su seno maternal al Hijo de Dios.

 

María es humilde, María es totalmente dócil a la voluntad de Dios, María es bienaventurada y "bendita entre todas las mujeres". Ella es referente esencial en la tradición cristiana de como un ser humano se constituye en "depósito" de Dios, porque El encuentra en ella las mejores condiciones de espiritualidad, de fina humanidad, de generosidad sin reservas, para que en ella suceda el designio salvador que trae a la historia humana el Verbo Encarnado. Esta es la consideración esencial que sugiero para nuestra oración de hoy.

 

Monseñor Romero y el Padre Arrupe aceptaron la voluntad de Dios, también con total disposición. Al primero este SI lo llevó a su entrega profética y al martirio, como celebramos ayer; al segundo, a una vida consagrada en la Compañía de Jesús, como superior general, y a una tarea apostólica de llevar a los jesuítas al servicio de la fe y a la promoción de la justicia, lo que le valió no pocas incomprensiones y sufrimientos. Estos hombres evangélicos, como Nuestra Señora, aceptan totalmente el acontecer de Dios en sus vidas, y, junto a ella, son referente de cómo se vive a cabalidad eso de cumplir la voluntad de Dios.

 

Cómo distinguir voluntad humana de voluntad divina? Coinciden? Son opuestas? Es la gran tarea del discernimiento y la propuesta específica de la espiritualidad de san Ignacio de Loyola, es buscar elegir el mejor camino para agradar a Dios haciendo un proceso de diferenciación de espíritus y de mociones hasta acertar en ese acatamiento de la voluntad del Padre de Jesús. A esto nos invita María con su SI incondicional: " Yo soy la esclava del Señor, que se cumpla en mí tu palabra" (Lucas 1:38).

 

Cuando en nuestra propia vida y en las vidas de tantas personas constatamos tantas veleidades a la hora de tomar decisiones importantes para la vida, voluntades caprichosas, intransigentes, o injustas o desatinadas, ver a María aceptando totalmente la invitación que Dios le hace a través del mensajero Gabriel es una pregunta fuerte y exigente para reorientar estas voluntades a esa VOLUNTAD, en la que la libertad humana ni se deteriora ni se humilla, sino que se reconfigura en la clave determinante del principio y fundamento teologal.

 

Cuántas decisiones irresponsables, cuántos desatinos, cuántas personas y grupos humanos afectados por este tipo de decisiones, porque hay voluntades "desordenadas", que dan la espalda a Dios y a los retos de la dignidad humana. María con su SI nos invita a esa reconfiguración de nuestra libertad inscribiéndola en la libertad que viene del Espíritu.

 

Esta docilidad es instrumento de vida definitiva para la humanidad trayendo a ella a Jesús, salvador y liberador. Cuando un ser humano se abandona plenamente en Dios se convierte en instrumento de gracia y de vida que vienen directamente de El. Todos estos referentes de NUEVA HUMANIDAD que hemos sugerido en esta comunidad orante son, como María, hombres y mujeres depósito de gracia! Así nuestros Monseñor Romero y el Padre Arrupe, Edith Stein, Teresa de Calcuta, Etty Hillesum, Maximiliano Kolbe, y tantos incondicionales al Padre.

 

Nosotros también podemos ser ese "vaso de Dios", como María, inscribiendo nuestra posibilidad de decidir en la voluntad amorosa y salvadora de El, viviendo en paz procesos de discernimiento espiritual. Esto es muy cuaresmal: cómo pasar de voluntades desordenadas a voluntades libres en el Espíritu, como la de Nuestra Señora.

 

Consideremos lo que ha sucedido en nuestra vida cuando nos hemos dejado llevar por caprichos, egoísmos, arrogancias, subjetividades extremas y consideremos también lo que nos ha sucedido cuando hemos acatado a Dios, cuando hemos tenido "la osadía de dejarnos llevar".

 

Esta es la tarea para hoy, en la Anunciación del Señor. A través de María se nos ANUNCIA que hay esperanza definitiva de plenitud con la oferta que el Padre nos hace de propio Hijo.

 

Damos gracias, Señor, por el don de María, por su SI de mujer bienaventurada, por el "fruto bendito de su vientre", por su voluntad de ser tu servidora trayendo a la vida humana a tu Hijo, Jesús. Y te pedimos que llegues a nuestras vidas para orientar nuestras voluntades a la tuya, para hacer lo mejor, lo que te de más gloria, lo que sirva de más a la construcción de un mundo digno y solidario.

 

Bendice a las Sras. Pepita, Martha ,Mariela, a sus familiares, especialmente al Sr. Obispo Merino, y a todos los fieles de su iglesia episcopal-anglicana. Bendice al sr. George Sears, a su esposa e hijos, bendice el ministerio de su hijo el Padre George Felipe Andrés.

 

Bendice a mi hermana Clarita y a todas las personas de nuestra lista, sánalas y concédeles el don de vivir felices cumpliendo tu voluntad, lo mismo a nosotros. Que Nuestra Señora, la santa Virgen María, inspire nuestras vidas con su acatamiento ilimitado de la voluntad del Padre, que la presencia encarnada de tu Hijo, nos lleve a Tí y a los hermanos, El que vive y reina contigo por los siglos de los siglos. Amén.

 

Feliz día, un abrazo

Antonio José Sarmiento Nova,S.J.