lunes, 4 de abril de 2011

Lunes 4 de abril.

Buenos dias:
 
Las lecturas de hoy
 
1. Isaias 65: 17-21
2. Salmo 29:2-13
3. Juan 4:43-54
 
La sociedad de la opulencia y del consumo esta en crisis de sostenibilidad. Aqui en USA viven momentos de extrema dificultad economica y laboral. Cierre de factorias, de grandes tiendas, licenciamiento masivo de empleados y trabajadores, y otros indicadores preocupantes de recesion. El asunto ya no es solo de nuestros paises de America Latina o de los africanos, tambien aqui en el "sueno americano" se tienen que apretar el cinturon con alta severidad. Se ven personas vendiendo cualquier cosa en los semaforos y en las calles deambulan buscando alternativas, suben los indices de pandillas criminales en las grandes ciudades como NY, Chicago,Los Angeles.
 
Cuantas veces en la historia de la humanidad se han venido abajo los idolos con pies de barro: cayo el Imperio Romano, cayo Alejandro Magno, cayo Hitler con su proyecto de supremacia de la Alemania nazi, cayo Napoleon. Todas las absolutizaciones humanas se vienen a pique, los proyectos politicos, ideologicos, economicos que se instauran con pretensiones imperiales se pulverizan, se hacen anicos. Y las consecuencias las padecen millones de personas que necesitan trabajar, vivir dignamente, satisfacer sus necesidades basicas.
 
Ahora el drama de tantos inmigrantes del mundo entero que vienen a este pais en busca de mejores condiciones de vida es siempre muy doloroso e impactante, y en estas condiciones de crisis economica y laboral se hacen mucho mas dolorosas. Cantidad de mexicanos, centroamericanos, colombianos, que llegan por "el hueco" aspirando a vivir mejor y se tropiezan con este mundo inhospito, desapacible, competitivo.
 
Que nos dice el Senor en estas condiciones? Donde esta el punto de quiebre? Hagamos oracion y discernimiento sobre estas realidades para verificar tambien si en nosotros se da un apogeo del consumismo, del culto al dinero, al confort material, al materialismo, y si esa idolatria se esta viniendo al piso por insostenibilidad. El tiempo de cuaresma es propicio para estas consideraciones porque nos lleva por el desierto del despojo, del vaciamiento, de la relativizacion de todo este tinglado para llevarnos al Dios unico y verdadero.
 
El mundo del consumo y del alto poder adquisitivo se muere por si mismo porque es imposible sostener economias tan opulentas, con tanto despilfarro, sin que en algun momento el mismo sistema demuestre su fragilidad, pero especialmente se impacta porque el sentido de la vida no se ha puesto en la trascendencia de Dios y en la consecuente busqueda de la dignidad humana sino en la futilidad de lo material, que asi sea deslumbrante y "prodigioso" solo es brillo exterior, como dice alguno de los salmos refiriendose a los idolos: tienen ojos y no ven, tienen oidos y no oyen, son quebradizos, inconsistentes.
 
Cuando cayo el muro de Berlin a finales de los anos ochenta, y vino todo el cambio de la Union Sovietica, la perestroika y todo ese proceso politico y economico, los defensores del "capitalismo salvaje" , como lo llamaba Juan Pablo II, dijeron: la historia nos dio la razon, y vino todo este inquietante triunfalismo neoliberal. Recordamos el famoso libro de Francis Fukuyama : "El fin de la historia y el ultimo hombre", en el que este pensador norteamericano-japones demuestra que con la crisis del modelo comunista se ha puesto en evidencia que el verdadero modelo de economia, de sociedad, de ser humano, es el que surge del capitalismo neoliberal.
 
Y que vemos hoy? mas pobreza, mas desempleo, mas indignidad y exclusion, a mayores capitales de las grandes multinacionales mayor empobrecimiento de las sociedades que no tienen las condiciones para emerger por si mismas. Los indicadores del drama social son escandalosos, claman al cielo, y todo esto es producto de este triunfalismo neoliberal, inconsistente, vacio, cultura "light" que no se compadece con la dignidad del ser humano que surge de su condicion de hijo de Dios.
 
El Padre Berrigan y Dorothy Day, Rigoberta Menchu y Monsenor Romero, Luther King y el Padre Arrupe, y tantos otros profetas del siglo XX, ya nos advirtieron contra este IDOLO ABOMINABLE.
 
Preguntemonos si estamos contaminados de culto al dinero, de consumismo y hedonismo, de desconocimiento del ser humano y de su necesidad de ser dignamente reconocido, oremos para constatar si en nuestra vida nos hemos dejado contaminar por la malignidad de este poder que ahora colapsa en el gran imperio norteamericano. Hagamos un discernimiento honrado para detectar que elementos de esta realidad pecaminosa nos afectan con el fin de empezar un proceso de ruptura y liberacion de estos afectos desordenados. Escuchemos los clamores de la humanidad, que son los clamores del Dios vivo y verdadero, seamos sensibles a estos llamamientos que nos invitan a construir el mundo, la organizacion social, la planificacion economica, el manejo de lo politico, con unos criterios de decidida raigambre humanista y trascendente.
 
El Dios que se nos revela en Jesus es un Dios que dignifica, que se hace solidario, que toma partido por la justicia, que se pone de parte de los debiles: dejemonos interrogar por El a la luz de estas consideraciones que son simplemente salvadoras y liberadoras, para que nuestra vida no se consuma en el facilismo del confort, del consumo irresponsable, de la acumulacion egoista, desconociendo las carencias y miserias de tantos y tantas en este mundo.
 
Estas son las propuestas para hoy. Dejemonos saturar de Dios y de humanidad.
 
Y sigamos empenados en nuestra comunidad orante del amanecer con la confianza puesta en Dios, respondiendole con lo mejor de nuestra libertad y de nuestras apuestas por la dignidad de todos los humanos, mas alla de ideologias, de religiones, de condiciones socioculturales, simplemente viendo que este africano, que este inmigrante latino, que este asiatico, que  este musulman, que todos estos rostros multietnicos, multireligiosos, son los rostros que claman justicia y reconocimiento; para nosotros, creyentes, esto proviene del mismisimo Dios.
 
Nuestros iconos de profecia y dignidad, el Padre Arrupe y Monsenor Romero, estan ante Ti, Senor, con nosotros,  presentandote todas estas peticiones, invocaciones, para que intervengas en las vidas de tantos seres humanos salvando, liberando, dignificando, sanando, y por eso una vez mas te entregamos a mi hermana Clarita y a todos estos y estas que estan en nuestra lista para que mires hacia ellos y que la tuya sea una mirada de misericordia, de curacion, de salud. Por Jesucristo, Nuestro Senor. Amen.
 
Un abrazo, feliz dia para todos
 

 
Antonio José Sarmiento Nova,S.J.

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